La solución a los baches en pisos industriales por lo tanto, depende de su procedencia. Por ejemplo, puede que haya que reparar las juntas o rellenar auténticos cráteres en el medio del paso. Sin embargo, el método elegido por lo general es súmamente erróneo.
Por un lado, se cae en el cemento como primera solución o en un preparado de hormigón desconociendo sus procesos y los movimientos del piso. Esto, trae consecuencias indeseadas como que la solución sea poco estética y un gastadero de dinero, ya que realmente no solucionará nada. Es decir, tomando este camino, más que seguro, en unas pocas semanas tengamos el bache de nuevo, con un Frankestein de colores en el hormigón. Esto sucede así, porque la resistencia del material no suele ser la adecuada y porque el fraguado tampoco lo es, generando rápido desprendimiento.
Entonces, ¿Qué hacer? Bueno, por suerte el tema es bastante sencillo: se necesita grouter de alta resistencia y adherencia. El grouter es un mortero de alta resistencia, ideal para los baches. Sin embargo, la complicación viene luego: una vez colocado, hay que pulir y endurecer el resto del piso para evitar desgranamientos futuros o roturas de juntas. Si ya ha hecho la reparación, consulte por nuestro servicio de piludo, reparación y endurecimiento de pisos industriales.