Bueno, se qué he dicho que cada tipo de piso es diferente y cada problema implica una solución distinta. Sin embargo, hay algunos universales que tenemos que tener en cuenta si queremos restaurar un piso.
En primera instancia, siempre tenemos que usar limpiadores neutros ya que no tienen químicos corrosivos que puedan dañar al piso y generar un problema mayor
En segundo lugar, si queremos remover manchas o suciedad incrustada, lo ideal es usar un removedor para pisos que se inserte en los poros para descontaminarlos. Esto suele ir acompañado de un trabajo con máquina rotativa y disco rojo o azul.
En tercer lugar, hay que pulir. Ya hemos explicado este procedimiento en detalle, pero se trata de un proceso mecánico con discos diamantados que cuerra la porosidad del piso, logrando una superficie uniforme e impermeable.
Finalmente, hay que impermeabilizar. Aquí, hay dos opciones: el sellado acrílico (que es muy bueno para casas y lugares de tránsito de liviano a medio) o el sellado con litio y teflon que es de alto tránsito, ideal para comercios y fábricas. Este último se aplica generalmente en pisos de hormigón que deban resistir autoelevadores, operarios pasando constantemente, camiones y maquinaria pesada.
Con este tipo de tratamiento, nos aseguramos un piso descontaminado, impermeable, fácil de limpiar, resistente, estétitco y una vida útil a largo plazo sin tener que gastar mucho dinero en cambiar el piso.
Si necesita restaurar un piso, no dude en contactarnos que lo asesoraremos con productos y servicios del más alto estándar de calidad en Argentina ¡Conocé por qué las grandes empresas nos eligen!